Este proyecto supone el acondicionamiento acústico de una gran sala destinada a albergar a numerosos estudiantes de medicina en una escuela de preparación al MIR. Era importante conseguir que el sonido en un aula tan espaciosa fuera óptimo, y para ello se instalaron paneles fonoabsorbentes de tipo básico en todo el techo.
Se optó por el color gris perla, que encaja con la estética monocromática de la estancia, y mantiene el contraste que suponen las sillas de colores. El proyecto ofrece una doble funcionalidad pues, además de la mejora de la acústica, los paneles fonoabsorbentes funcionan como un elemento decorativo integrado en el diseño del centro.
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