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La combinación de acabados ha sido pensada para aportar personalidad a las estancias, contrastando con el parquet cerámico de color gris claro y las paredes blancas. La madera de nogal, además de elegancia, aporta calidez y carácter que, combinada con las puertas lacadas en un color blanco lino consiguen una armonía de color sugerente.
La habitación contigua al dormitorio en suite se ha destinado a vestidor principal, compuesto por 5 módulos dotados de accesorios que optimizan el espacio como, por ejemplo, la barra hidráulica, los zapateros extraíbles o la iluminación interior que complementa la insuficiente iluminación original.
La isla central, protagonista del espacio, configura la circulación y proporciona una superficie de exposición bajo la urna de vidrio fumé que combina con la chapa de madera natural de nogal. El conjunto descansa sobre una alfombra que ayuda a resaltar su presencia a la vez que su riqueza tonal rompe con la monotonía del pavimento y la calidez de la madera.
