Está muy extendida la creencia de que contratar un decorador, es un lujo que sólo unos pocos afortunados se pueden permitir. ¿Eres de los que piensan así? ¡Pues permíteme decirte que te equivocas!. En black cotton studio estamos convencidos de que no es necesario disponer de un presupuesto enorme o de vivir en una mansión, para poder tener un hogar funcional y sobre todo, bonito. Es el caso de ésta mini-deco, donde podemos apreciar el antes y el después de una zona de trabajo. Con un presupuesto también "mini" y usando muchos de los elementos que la clienta ya poseía, hemos conseguido darle a esta rincón de estudio un toque especial y mucho más agradable, donde trabajar.
No hace falta ser un manitas, ni un experto en DIY, con un par de trucos conseguirás darle una nueva vida a objetos que seguro que estabas pensando en sacar de tu vida. Un poco de pintura en spray es suficiente para renovar completamente el aspecto de este flexo. También se ha pintado la rejilla a juego, que a modo de tablón, nos sirve para colocar listas de tareas, notas o fotografías.
No hay nada mejor para hacer un hogar más personal, que decorar con objetos que has ido recolectando a lo largo de tu vida. Aquí hemos utilizado un par de estantes de madera, que además de ayudar a mantener el orden, facilitan mucho el que poder cambiar las piezas decorativas tanto como se quiera.
Aunque sean objetos muy dispares, combínalos entre sí de manera que formen un todo.
Añade algo de verde para dar vida y frescura al ambiente.
Combinar alturas hace las composiciones más dinámicas y resaltan la importancia de cada objeto. No es necesario que todos los elementos estén apoyados, colgar algunos permite liberar espacio y equilibrar el conjunto.
Deja tu comentario
Deja tu comentario