¿No os pasa que cuando vais a casa de algún amigo y entras en la cocina, te parece un mundo aparte? Su cocina es tan bonita que no sabes cómo lo ha conseguido. Suelos de madera, luz natural bien aprovechada, muebles a medida o plantas que decoran algún rincón son algunas de las claves para tener una cocina acogedora. Y no es tan difícil de conseguir. A veces, solo con un poco de imaginación, quizá también algo de asesoramiento y de inspiración, podemos conseguir la cocina que siempre hemos soñado.
En este artículo
- 1. Muebles que permiten gran almacenaje
- 2. Una chimena en la cocina
- 3. Detalles que la hacen única
- 4. Suelos de madera
- 5. Maravillosa luz natural
- 6. Una pizca de color
- 7. Cocinas con mesa para toda la familia
1. Muebles que permiten gran almacenaje

Una de las premisas para tener una cocina acogedora es tenerla ordenada. De nada sirve tener la cocina más bella si llenamos las encimeras de utensilios, aparatos de cocina o de adornos. Somos partidarios de mantener el orden y de aprovechar las encimeras para trabajar o añadir una planta. Poco más. Por eso, el almacenaje en la cocina es tan importante. Opta por gaveteros de gran capacidad que además se adaptan a cualquier rincón y tamaño. Elige grandes cajones con organizadores, verás lo útiles que son.
2. Una chimena en la cocina

Aunque este es un lujo que muy pocos se pueden permitir, colocar una chimenea dentro de la cocina la hace no acogedora, sino super acogedora. Imagina en las tardes frías de invierno, poder tomarte una taza de café con la chimenea encendida, ¿no te parece un placer increíble? Si te animas, tendrás que ponerte en manos de un buen profesional para que te haga una instalación correcta y no tengas problemas. También hay chimeneas decorativas, que tampoco están nada mal.
3. Detalles que la hacen única

Hay materiales, detalles, pequeños matices que pueden darle un aire muy especial a tu cocina. Por ejemplo, los suelos de piedra o los muebles de madera le dan un toque rústico a la cocina y eso hace que sea muy acogedora. También las encimeras de piedra o pequeños detalles tan -sencillos e importantes a la vez- como los perfiles de las ventanas de madera o de algún material natural que le dan un toque muy agradable a la decoración.
4. Suelos de madera

Una cocina acogedora suele ser esa en la que entras -aunque sea la primera vez- y te sientes como en casa. Y no es tan difícil de conseguir: hay materiales que ya de por sí te ayudan, por ejemplo la madera. La madera en el suelo es una buena opción, es verdad que su mantenimiento es más trabajoso que el de otros materiales como los cerámicos, pero la sensación de hogar que aporta es inigualable. Elige una tarima o laminados fuertes, aptos para esta estancia de la casa.
5. Maravillosa luz natural

No dejes de aprovechar la luz natural que entra en tu cocina. Un gran ventanal te permitirá sacarle partido a este lujo al que no todos podemos acceder. Justo debajo de la cocina, aprovecha para colocar la zona de lavado y de trabajo, con una amplia encimera en la que poder trabajar. La luz natural es uno de los elementos más importantes de la cocina, que bien aprovechada, te permitirá proyectarla por toda la estancia y allí donde no llegue, optar por luz artificial, para iluminar los puntos ciegos.
6. Una pizca de color

Aunque la tendencia por cocinas blancas, grises o de madera, sigue en alza, lo cierto es que un pequeño toque de color también puede hacer muy especial tu cocina y darle ese matiz acogedor que buscas. No somos partidarios de apostar por colores estridentes para conseguirlo, pero sí introducir el color en pequeñas dosis como una pared, un ventanal o en los propios complementos.
7. Cocinas con mesa para toda la familia

A muchos les puede parecer que una cocina en blanco y negro es fría y que no resulta acogedora. Sin embargo, todo depende de cómo la decoremos. Es cierto que esta combinación de colores, clásica, también puede ofrecer la posibilidad de ser agradable. Añade una gran mesa en el centro de la cocina para que toda la familia pueda reunirse a comer. Apuesta por mobiliario sencillo y a ser posible de madera, para "rebajar" ese toque de sofisticación que suele aportar el negro.
hace 6 años
Me gusta cocina grande pero no me gusta comer en ella.