Para darle un toque más decorativo a la entrada de una nave industrial, se instaló en el recibidor un suelo vinílico para prevenir posibles problemas con agua de lluvia que en ocasiones entró por debajo de la puerta de entrada. La escalera se revistió con un parquet flotante de roble tintado. También se instaló un pequeño mueble y un pasamanos.
En este artículo