Para lograrlo, una buena idea es apostar por mejorar la eficiencia energética de tu casa; es decir, optimizar al máximo los recursos y el consumo energético para conseguir ese nivel de confort en casa. ¿Cómo? - te preguntarás. Con estos sencillos consejos de eficiencia que te explicamos, tu vivienda estará lista para este invierno (y ahorrarás cada mes).
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De nada sirve seguir estas recomendaciones sin antes echar un vistazo a la tarifa que uno tiene contratada en casa y comprobar si realmente lo que se está pagando es lo que necesitas en tu casa.
Cierto es que con la amplia oferta que hay en el mercado, y en ocasiones lo complicado que resulta entender una factura, es algo lioso elegir la mejor opción energética para casa.
Por eso, nada como apoyarse en los profesionales de Nedgia que te recomiendan visitar el comparador de tarifas de la CNMC (Comisión Nacional del Mercado de la Competencia) para encontrar y comparar todas las ofertas.
Si ya has comprobado que tu tarifa es la adecuada para tu casa, vamos a por los consejos más prácticos. Son tan sencillos que no te costará nada ponerlos en práctica este invierno para tener un hogar de lo más eficiente.
- No abuses de la calefacción. Para tener un ambiente agradable y cálido en casa es suficiente con tener el termostato a 19-21 grados, y bajarlo unos grados cuando vayas a dormir. Un calor que, además, se mantendrá mejor en casa si por las noches te acuerdas de bajar las persianas para que este no se escape por las ventanas.
- Precisamente, en el caso de las ventanas, revisa que estén correctamente aisladas. De lo contrario, puedes perder hasta un 30% de calefacción que se escapa por fisuras de ventanas obsoletas o con un aislamiento deficiente.
- Deja que el calor de los radiadores inunde toda la casa. Así pues, nada de poner muebles delante, ni ocultar estos con cortinas, sofás o cubiertos de ropa para que la colada se seque. Y no te olvides de purgar los radiadores de vez en cuando para mantenerlos en un óptimo estado de mantenimiento y eficiencia.
- Siempre que haya sol, aprovéchate de esa fuente de calor natural (y gratis) y que entre a raudales en casa para calentarla. Es más, incluso en esos momentos puedes apagar la calefacción y ahorrar en tu consumo.
No solo se trata de gestos que hagas por ti mismo. También llevando a cabo los quehaceres diarios, e incluso usando de forma responsable los electrodomésticos, tu vivienda ganará en eficiencia energética. Por ejemplo, cuando vayas a cocinar y estés usando el horno, no te dediques a abrir la puerta cada cierto tiempo si no quieres desperdiciar un 25% de energía acumulada; y usa el microondas y la olla a presión para ahorrar hasta un 70% y un 80% de energía respectivamente.
En el caso de que tengas caldera o calentador, regula la temperatura de los grifos para que estos no suban de 35º; cuando te vayas a duchar, cierra el grifo cuando te estés enjabonando; mantén la temperatura del frigorífico entre 3ºC y 7ºC y la del congelador a -18ºC y usa el programa de la lavadora de agua fría o de temperatura menor a 30ºC. Por la noche, nada de dejar ordenadores o el televisor en modo stand by; apágalos del todo.
En invierno, con las bajas temperaturas, buena parte del gasto energético se dispara si subimos el termostato de la calefacción sin pensar en sus consecuencias. Puedes ser responsable en este sentido y confiar en un sistema de calefacción eficiente, algo que puedes tener con el gas natural. Y es que el gas natural tiene la ventaja de tener una alta eficiencia en comparación con otros sistemas convencionales de calor, además de contar con un precio más económico y sin tener que estar pendiente de que se acabe, como ocurre con otras energías.
Como ves, con estos consejos, reducir tu gasto energético será sencillo. Puedes profundizar más en estos consejos de eficiencia y cuidado del planeta de la mano de Nedgia, Grupo Naturgy, y de sus profesionales.