Debido a la cuarentena por el COVID-19, tenemos más tiempo que nunca para estar en casa y disfrutarla. Sin embargo, son muchas las horas en las que la monotonía (y también la tristeza) nos domina, y no somos capaces de sentirnos realmente bien. Nos esperan más semanas de confinamiento, pero... ¡nada de ponerse triste! Si aún no te has hecho a la idea de seguir en casa, y sigues sin organizarte para que, de puertas para dentro, todo funcione bien, no lo dejes para más adelante. Toma nota de las iniciativas y buenas hábitos que poco a poco y sin darte cuenta podrás poner en práctica en casa, y que conseguirán que se respire un ambiente más organizado, positivo y ¡hasta feliz! ¿Te atreves a ver el vaso medio lleno? Sigue leyendo y verás que no es tan difícil.
En este artículo
- La felicidad está en el orden
- Reduce las cosas visibles
- Planifica comidas
- Planea algún proyecto sencillo
- Monta un cine en casa
- Conéctate a lo que te hace feliz
- Disfruta de las cosas que ya tienes
- No dejes de hacer planes
- Naturaleza en casa
La felicidad está en el orden
Las gurús del orden lo están anunciando a bombo y platillo estos días porque es una gran verdad. Si tu casa está patas arriba, es difícil que las cosas marchen bien. Vence al enemigo por partes, ganando pequeñas batallas. Ataca un día el problema del orden en el baño (entrando de lleno a los cajones y armarios), sigue con tu armario o el de los niños... Reserva un par de días a la cocina y termina con el cuarto de los peques o el salón. Recuerda que muchas cosas se pueden hacer en familia, y que lo que no puedas tirar o donar ahora, puede esperar en tu trastero en bolsas perfectamente identificadas.
Reduce las cosas visibles
En todas las estancias de tu casa. Deja a la vista sólo esas cosas prácticas y bonitas de uso cotidiano, y guarda lo demás. En el recibidor por ejemplo, dependiendo de como sea, estarán chaquetas, zapatos y las llaves; en el salón, todo guardado en muebles, teniendo despejada la mesa de comer o la mesa de centro con cajas u organizadores que recojan todo en un mismo lugar; en el dormitorio, la cama hecha y la ropa en su sitio (nada de dejarla en sillas o bancos). Lo que tengas que lavar, enseguida al cesto, lo que se pueda guardar, directo al armario, pero bien colocado. Os hemos contado otras veces un montón de trucos para aprovechar mejor el fondo de los armarios y exprimir el espacio que nos ofrecen. Echar un ojo si os faltan ideas.
Planifica comidas
El tema menús suele ser una fuente de conflicto: unos quieren comer una cosa, otros otra... Y a todo esto, con la dificultad de tener que salir ocasionalmente al súper para comprar la básico. Evita este problema, involucrando a toda la familia en la creación de menú semanal ¡pero siendo realistas! Entre semana, recetas prácticas, rápidas y sanas. El fin de semana, podemos probar cosas nuevas y más sofisticadas. Aprovechar para planear hacer recetas nuevas, postres sencillos... Todo el mundo se puede poner el delantal para cocinar y después ayudar a limpiar. Poner música, mancharos las manos y montar vuestro particular MasterChef en casa. El objetivo no es que salga todo rico, sino reírse más y hacer al otro feliz.
Planea algún proyecto sencillo
Pintar la casa, o una habitación, renovar alguna pared con papel pintado o un fotomural, cambiar las pesadas cortinas por unos estores que nos dejen ver la luz... Hay muchas tiendas que siguen vendiendo artículos relacionados con tu casa de forma segura. Amplía los espacios, sin mover tabiques, cambiando la distribución de los muebles. De esta forma podemos acercarnos más a las ventanas y balcones (que ahora mismo nos da la vida) y tener más espacio libre en el suelo para que los niños jueguen y todos podamos hacer deporte. Muchos entrenadores están haciendo sesiones en línea que puede seguir toda la familia. Botellas de agua en lugar de pesas, alguna alfombra si no tenemos esterillas. Para mover el cuerpo y echar unas risas, tu casa es válida. Sólo hay que ponerle ganas.
Monta un cine en casa
La ilusión de ver un estreno en el cine se puede trasladar ahora a tu casa. Marca día y hora, y preocúpate de montar todo un escenario "de cine". En el salón o en el cuarto de los niños, sentados en el sofá o con los colchones y muchos cojines por el suelo. Los peques, pueden encargarse de hacer las entradas y el cartel de la peli, y los más mayores de preparar las palomitas y las bebidas. Cuando todo esté listo, apagar las luces, sacar los móviles de la habitación (en silencio, que nos conocemos) y darle al play. Disfrutar de una gran sesión de cine familiar en casa es una buena forma sentirnos (y hacer que los demás se sientan) FE-LI-CES.
Conéctate a lo que te hace feliz
Tenemos que conectarnos mejor con nosotros y con los nuestros. Piensa en esos hobbies que abandonaste por falta de tiempo, y que ahora podrías recuperar o incluso contagiar a los tuyos para que también se aficionen: pintar, coser, coleccionar todo tipo de cosas. Si hay una habitación libre en casa que se fue llenando de trastos, ahora es momento de entrar en ella y ponerla en orden para recuperar ese espacio que tanta falta te hace ahora. Cuelga esa lámpara que espera meses en el trastero, móntate un escritorio sencillo, libera espacio con algunas estanterías voladas y céntrate en el objetivo de volver a tener tiempo de calidad, para esas cosas que te hacen sonreír.
Disfruta de las cosas que ya tienes
Si diseñaste una cocina preciosa (¡de revista vamos!) y casi no la tocas; si te montaste tu particular spa en el baño cuando decidiste poner una bañera exenta o aquella ducha con mil chorritos, y sólo te das un homenaje muy de vez en cuando; si cerraste la terraza para tener más espacio y ahora está llena de trastos... Párate a pensar: ¿no es justo ahora el mejor momento para disfrutar de todo esto? Tu casa, más grande o pequeñita, con muchas comodidades o menos, al final es nuestro hogar y en él nos tenemos que refugiar. Empieza a disfrutar de lo que tienes, organizando los horarios para que no sientas que todo el día estás tetetrabajando o riñendo con tus hijos. Si una cosa nos sobra ahora es tiempo. ¡Vamos a organizarnos!
No dejes de hacer planes
Nos enfrentamos a algo incierto y en gran medida fuera de nuestro control, por eso es importante ser consciente de las cosas que sí dependen de nosotros y que sí podemos controlar. Hacer planes futuros relacionados con nuestra casa y nuestra vida en general, nos ayuda a visualizar un futuro cercano en el que las cosas estén funcionando bien. Haz una lista de planes que quieres hacer cuando esto acabe: aquel viaje pendiente, esa reforma que hace tiempo tenías pensada... Cuando salgamos de ésta, cambiaré el suelo por uno más limpio; cuando todo esto acabe, volveré a invertir en mi casa, mi refugio y el de mi familia.
Naturaleza en casa
Se está diciendo estos días que quién tiene una terraza, patio ¡o jardín! tiene un tesoro. Pero en realidad cualquiera puede montar en casa su particular edén, sólo hace falta luz y un poquito de agua. Piensa que cualquier habitación con iluminación natural se puede llenar de plantas de interior y añadir elementos típicos de las terrazas. Una hamaca, un sillón relax, incluso unos colchones en el suelo... Aprovecha estos días, para recuperar piezas o materiales que te puedan servir para cumplir el objetivo de meter la naturaleza dentro de casa.
Recuerda que tu casa ahora es un espacio sagrado y tenerla ordenada es fundamental para vivir en ella en paz en la cuarentena y además hacernos felices.
¿Y tú, cuéntanos qué cosas estás haciendo en casa para sentiros mejor y más felices? Nos encantaría que compartieras tu experiencia para ayudar a los demás con todas estas ideas.
hace 3 años
Gracias por ir dar buenas ideas.
hace 3 años
No todos disponemos de estas viviendas, vamos que los que tienen estas viviendas no tienen problemas de confinamiento ni de otros problemas que vivimos en esta cituacion, que poco se acerca a la realidad de muchos ciudadanos
hace 3 años
El secreto tener una actitud positiva.Antes del confinamiento solo queria salir de casa e ir a trabajar.En casa mw agobiava.Ahora no saldria para nada.Duermo cuando quiero y cuanto quiero.Me relajo, miro la tele, hago recetas nuevas, etc...Ya tengo el piso impecable y disfruto en él.Un piso sin vistas, sin jardín, sin balcón.Pero es el rincón donde me siento segura.
hace 3 años
Mira que me encanta todo lo que publicáis, pero pienso que no os acercáis a las viviendas reales que tenemos la mayoría de familias con su día a día.
No podemos poner muebles minimalistas, en familias de cuatro miembros con habitaciones de adolescentes o de matrimonio con camas preciosas pero con armarios para la barbie, o salones de 100 metros.
Espero que esto ayude. Un saludo
hace 3 años
Solo sabemos quejarnos? Cuanta gente daria lo que fuera para en vez de estar en el hospital , pudieran dormir en su cama y bajo el techo de su hogar.Aprovechemos los que no estamos enfermos y no nos quejemos tanto.Creo que desde habitisimo nos intentan ayudar.Demosles las grácias.Son tiempos dificiles para todos!!!! Salud.
hace 3 años
Interesante
hace 3 años
Todas esas sugerencias son efectivas,y ha sido muy oportuno que en este momento se mencionen y se recuerden.gracias.