En este proyecto se ha realizado la reforma de dos plantas del Centro Cívico de Monte Alto. El objetivo era crear un espacio donde la privacidad y el respeto por el silencio fuesen los protagonistas.
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Silencio, orden y espacio
En este tramo del proyecto para la reforma de la entrada del Centro Cívico de Monte Alto se trataba de ordenar los accesos, las circulaciones y el control; y generar una sala / vestíbulo de las aulas de actividad y jardín de infancia existentes en planta baja. Sólo nos obsesionó una cosa: el silencio, entendido desde varios sentidos. Por un lado silencio de vista, intentando generar un espacio limpio y bien proporcionado. Monocromático. Por otro el silencio de oído, buscando una alta calidad acústica que rebaje los decibelios en los momentos de intercambio y actividad. Estos silencios, permiten que escuchemos al tacto, a los materiales, que acostumbran a estar callados.
Privacidad, tranquilidad y luz
Para la reforma del Servicio de información, valoración y orientación (SIVO) del Centro cívico de Monte Alto era necesario transformar el espacio en un entorno adecuado para garantizar la privacidad y favorecer la relación entre el trabajador social y las familias usuarias. La atención se realiza en dos niveles, uno más general, que actúa como filtro, y otro más específico y privado. Trasladamos esto creando una zona de entrada o acogida, un espacio tranquilo y acogedor, para luego guiarlos a un segundo nivel, el de los despachos, para una atención más privada. Introducimos luz natural al pasillo a través de los propios despachos y que al igual que la entrada se caracteriza por el uso de la madera para dar calidez al espacio. Luz y madera se entremezclan, y la calidez se transforma en luz.
Fotógrafo: Pablo Mella.