Se pretendía una vivienda familiar con dos ambientes claramente diferenciados y que girase en torno a la piscina y la futura pista de paddel. Los espacios son generosos y quedan intercomunicados. Desde el primer momento se persiguió el concepto de construcción tradicional, aunque la vivienda quedó dotada con todo tipo de instalaciones de domótica y climatización. Completaba el programa una segunda vivienda para invitados.




