La profunda reforma de esta “casa barata” parte de la voluntad de sus habitantes de tener “una casa para ser vivida”. Con la voluntad de conseguir ese objetivo se trabaja con dos focos: una distribución cómoda para un día a día de calidad y una selección de materiales que les sean cómodos, cercanos, lejos de los lujos…
Por lo que se refiere a la distribución se usan recursos que permitan, a pesar de los impedimentos estructurales, una óptima comunicación entre las estancias, que minimicen las divisorias existentes tanto en la planta de día (baja) como en la relación entre plantas. Así pues, la escalera se convierte en uno de los elementos protagonistas, sin ninguna pretensión y con pocos materiales, marca el carácter de todo el conjunto ya desde el mismo acceso a la vivienda. La proximidad se consigue con materiales muy habituales a lo largo de toda la casa: la omnipresente madera de pino, el hierro pintado, la pared recuperada, el pavimento de porcelánico de baldosa catalana, la combinación de colores de baldosa valenciana, etcétera.
El resultado está a medio camino entre la esencia del pasado y la practicidad actual. Se ha conservado y enfatizado un exterior con personalidad dentro de un conjunto urbanístico y un interior vivo, práctico funcional y bello para ser vivido.
Arquitectura: Lluís de la Fuente
Fotos: Mostassa Estudi
En este artículo
En esta casa la división entre estancias y plantas fluye y es sutil y en la que la esencia de la casa antigua y la practicidad contemporánea se dan la mano.
Gran comunicación entre los espacios con un generoso comedor central.
La Casa CMB es un proyecto en el que con el objetivo de conseguir una "casa para vivir", se han escogido materiales próximos y habituales como la madera de pina, el hierro pintado, pavimento de "rajola catalana" y caprichosos juegos de baldosa esmaltada valenciana.
hace 2 años
Cuesta creer que un suelo como el gres rústico, que a priori es un material que la gente no considera, quede tan bien equilibrado en todo el espacio... Me encantan estas viviendas en las que se arriesga en todo: colores, materiales, iluminación... No es la típica reforma que hace la mayoría en la que es todo blanco-negro-gris con tarima... Bravo!
hace 2 años
Efectivamente, reconsiderar los materiales antiguos tanto a nivel funcional, como cromático es lo que le da a esta casa un aire mediterráneo, de casa de pueblo y, en definitiva, de vivienda en la que estar a gusto desde el primer día, que era el principal requisito de los clientes.
Gracias por el comentario!