En este artículo
- En contacto con el exterior
- ¿Cómo conseguir un buen aislamiento térmico?
- Otros trucos para mantener el confort de tu hogar
En contacto con el exterior
Un correcto aislamiento térmico de ventanas hace mucho a la hora de ayudar a ahorrar hasta un 40% en la factura energética y la forma más sencilla de conseguirlo es contar con unas ventanas aislantes que cumplan esa función.
Y es que, al hablar de eficiencia energética, los posibles huecos que haya en puertas y ventanas requieren toda la atención.
¿Cómo conseguir un buen aislamiento
térmico?
Así que el aislamiento térmico es importante para evitar que entre frío de la calle y se derroche calefacción. Para ello, nada mejor que contar con un doble o triple acristalamiento con Aislamiento Térmico Reforzado (ATR). En este sentido, CLIMALIT PLUS® de Saint-Gobain BUILDING GLASS con vidrio SGG PLANITHERM® 4S o SGG PLANISTAR® ONE se plantea como una buena solución que permitirá la entrada de luz natural y que mantendrá el frío a raya.
Además de favorecer ese ahorro de calefacción y mejorar el confort en el hogar, este tipo de vidrios ATR que puedes encontrar en CLIMALIT PLUS® consigue reducir las pérdidas energéticas a través del cristal de ventanas y cerramientos en un 40% respecto a un doble acristalamiento básico.
En definitiva, la mejor solución para anticiparnos al invierno y preparar la casa es cambiar este elemento por modelos de calidad contrastada y que tengan un buen nivel de hermeticidad para conseguirlo.
Otros trucos para mantener el confort de tu hogar
Además de apostar por la mejora térmica de las ventanas, algunos consejos para evitar que el calor se escape son así de sencillos:
- Revisa las puertas ya que en estas puede haber brechas lo suficientemente grandes como para que se escape todo ese calor doméstico. Si esto ocurre, la solución pasa por sellar esos huecos con tiras de plástico adhesivas que se colocan sobre todo entre la puerta y el marco.
- Purga los radiadores: igual lo desconocías, pero el aire atrapado en los radiadores hace que no funcionen eficientemente. Si hay puntos fríos en estos elementos puede ser una buena señal de que necesitan purgarse. Así se liberará ese aire y el sistema de calefacción funcionará de manera correcta y con todo su potencial.
- Haz uso de las cortinas: aunque las ventanas estén correctamente aisladas, incluir una cortina siempre sumará al confort del hogar, sobre todo si éstas son resistentes o de forro térmico.
- A la hora de colocar los muebles evita disponer sofás o mobiliario grande cercano a los radiadores. Estos pueden actuar como barrera impidiendo que el calor se propague por la estancia. En cambio, si tienes techos altos, la colocación de estanterías encima sí que puede fomentar la canalización del calor hacia la zona deseada.
- Persianas: son una segunda barrera para el viento, el frío y la lluvia durante el invierno. Eso sí, es importante que la caja de la persiana esté bien sellada para evitar las pérdidas de calor en casa.
- Alfombras en el suelo: en los pavimentos de mármol, cerámica u hormigón coloca alfombras que actúen como aislantes y aporten una sensación de calidez. Si, en cambio, en tu casa los suelos son de madera, parqué flotante o moqueta no tienes que preocuparte ya que estos materiales son muy aislantes de por sí.