¡Qué maravilla! Sol, montaña, naturaleza… Llegó la hora de encender la chimenea, ponerte una peli, taparte con la mantita... ¡e hibernar cual oso! Nos escapamos a 6 destinos rurales (dentro y fuera de España) donde el relax, en clave 'rural chic', está asegurado. Alojamientos rurales que nos descubren el valor de lo tradicional, donde el gusto por la decoración sencilla no es un plus, sino una forma de entender el descanso de sus huéspedes. Casa rurales, que alternan paredes de piedra con otras de yeso en colores alegres, suelos de madera y baños sencillos de tamaño dispar, pero suficiente en cualquier caso. Ahora que estamos en invierno, ¡no hay mejor plan para el fin de semana que resguardarse en una cabaña en medio del bosque! ¡Y sabemos que estas te van a encantar!
Una casa rural para volver a enamorarse
Ponemos rumbo a la casa rural más bonita del mundo. En 2007 Íñigo Aragón (fotógrafo y decorador) y Pablo López (profesional del turismo) compraron una casa del siglo XIX ubicada en Sorzano (La Rioja), a escasos 15 kilómetros de Logroño. Destartalada pero con enormes posibilidades, comenzaron a restaurarla siguiendo los principios del movimiento Art & Crafts. El resultado, una casa encantadora que respira mimo y delicadeza en cada detalle y a la que debería ser obligado peregrinar al menos una vez al año, como para recordar la importancia de la vida slow... Este alojamiento rural con capacidad para 10-12 personas consta de cinco dormitorios, dos amplios salones con zona de comedor, cuatro baños y una cocina. Esta casa tiene encanto propio, de paredes blancas, suelos hidráulicos, objetos 'vintage', piezas actuales, plantas de interior, colores suaves y luz. Mucha luz. Allí el tiempo se para, bienvenidos a Casa Josephine.
Divertida masía bajo muros de piedra
Hacemos una parada en este precioso Hotel Rural Ecológico: Can Casi, que nos muestra el paraje natural del Triángulo de Oro del Baix Empordà. Es un Bed and Breakfast muy peculiar donde podremos desayunar en un gran jardín, bañarnos en la piscina o disfrutar en una de sus 4 suites. Cada una de ellas, ambientada de una forma muy particular incluyendo colores y elementos propios que se adaptan a la peculiar arquitectura de la vivienda. El nombre de las habitaciones lo dice todo: Happy, Keep Calm & Relax, Enjoy, Smile y Love. Esta masía, decorada con todo lujo de detalles y sin perder el toque payés, tiene su filosofía de respeto y cuidado por el medio ambiente, donde se pone de manifiesto en su mobiliario ecológico y en los objetos sostenibles que usan para dar más valor a cada uno de los rincones: las cestas de mimbre, las damajuanas y un sinfín de objets trouvés acompañan a los muebles reciclados del Can Casi. El ambiente decorativo es ecléctico, naif, land art y un punto divertido. Sobre el cabecero de una de las habitaciones cuelga… ¡una Vespa! Hay quienes soñaron con pasarse la vida entera en Can Casi…Y lo consiguieron.
En el campo como en la ciudad
Nos encontramos en Castellón, en el casco antiguo del precioso pueblo de Vilafamés, en una casa de cinco plantas del siglo XVII restaurada para albergar este pequeño hotel sobrado de encanto con nueve habitaciones nada más (con chimenea, abuhardillada, dúplex…) Una enredadera cubre la altísima fachada de piedra de esta casa encantada de aire medieval, que se alza ante un insólito paisaje. Desde sus balcones, suspendidos en el aire, una hermosa vista nos inspira. Construida en piedra roja de rodeno, la casa se alza a más de 12 metros sobre la línea del muro de la ciudad medieval. El tónico, una vez aposentado, tiene sabor a panorámica desde los balcones del edificio, literalmente colgado sobre los olivares que ciñen esta pintoresca. Un lugar no solo para descansar; un espacio para soñar, para disfrutar del tiempo. Este jardín puede ser todo menos aburrido. Hay lienzos interiores de mampuesto que enamoran; rincones y texturas que recuerdan a los de los palacios venecianos; flores naturales sobre las mesas y en los poyetes de la chimenea; destellos ambarinos en la mayoría de las habitaciones, ninguna igual a la otra.
Una casa rural que despierta los sentidos
Esta vez salimos de España para trasladarnos al sur de Francia, al norte de Montpellier, en el corazón del Langedoc, 600 metros sobre el nivel del mar, la granja "Mas de Fougairolles" nos invita a retroceder en el tiempo. Una preciosa casa rural en plena conexión con la naturaleza que la rodea, con toda la esencia de las casas de campo de piedra y madera. Una casa de campo de granito construida en 2 plantas con impresionantes vigas de castaño a la vista. El pavimento esta ennoblecido con losas de mármol antiguas dispuestas en opus romano. Y para iluminar aún más las salas de estar, estarás rodeado de tonos claros que se han visto favorecidos; el lino natural, el gris pardo y el verde se funden en una armonía entre las paredes de piedra expuestas o recubiertos con una capa de cal de aspecto crudo. Un idílico telón de fondo para los muebles y objetos familiares, pintados con pátinas blanquecinas encontrados en los mercados de la zona. Si hablamos de Francia hablamos de encanto. Te quedarás admirando los elementos vintage, la elegancia de la piedra y el encanto del paisaje.
Un sueño llamado Valdirose
A escasos kilómetros de Florencia y enclavado en las colinas de Lastra a Signa, encontramos Valdirose, una villa palaciega, de mediados de siglo XIX, convertida en un pequeño bed & breakfast. Seguramente la habéis visto muchas veces, porque ha salido recomendada en revistas, webs y blogs de todo el mundo. Con sólo cinco habitaciones, de tonos crudos y sábanas blancas donde las notas de color las aportan sus tiestos con flores en tonos pastel. Suficientes para ser la puerta de entrada a la felicidad. Huele a limpio y cada una de sus habitaciones de estilo provenzal tiene nombre propio: desde Memorie, pasando por Buona Sorte para acabar en Segreti. Cada detalle, cada objeto y cada pieza están tan cuidados y son tan delicados... Para ocupar alguna de ellas hay lista de espera. Así que ahora, sólo queda que mires tú también las imágenes de Valdirose y sueñes con ella. Aunque, advertimos: puede que te quedes sin palabras. ¿Acaso hay excusa para escaparse por unos días a la vecina Florencia?
Un refugio a medida
Terminamos nuestra ruta rural descubriendo los rincones de uno de esos lugares que atrapan. Se llama Predi Son Jaumell. En la costa oriental de Mallorca, este hotel country chic lleno de color y glamour. Una antigua “possessió” del siglo XVII reformada para crear un auténtico escenario de relax y tranquilidad en el campo mallorquín. En el diseño se aprecia la cultura mallorquina en todas sus vertientes: materiales de construcción, texturas, formas, colores, textiles naturales…Todo ello trabajado artesanalmente al detalle para conseguir un ambiente tradicional, relajado y de calidad. Rodeado de encinas, almendros y algarrobos seduce sin remisión. El hotel cuenta con 24 suites, cada una con un estilismo propio, con vistas al campo mallorquín y al castillo medieval de Capdepera. Cada una es única con detalles arquitectónicos diferentes que resaltan gracias a la iluminación, totalmente cuidada y muy estratégica. Además todo el mobiliario ha sido diseñado y fabricado exclusivamente para este hotel, trabajando mano a mano con artesanos locales. En cuanto a materiales destaca la “llatra” (hojas de palmito trenzadas trabajada completamente a mano y casi en peligro de extinción), para crear objectos decorativos como lámparas, alfombras o cabezales y así reavivar la tradición. Las camas con dosel frente a la piscina, los manteles de hilo en las mesas del porche y una cocina que será otro de tus mejores caprichos. ¿A qué estás esperando?
1 Comentario
lindo¡¡¡¡¡¡¡¡