Con isla o sin ella, con muebles en paralelo, forma de L o de U... Hay muchos tipos de cocinas y cada una tiene sus peculiaridades (aunque tenga la misma planta). Por eso, cuando te planteas hacerla de cero, o quieres reformar la que ya tienes, son muchas las dudas que te asaltan para conseguir la mejor distribución, y una de las dudas que más nos asaltan es si las barras de cocina merecen tanto la pena como dicen. Toma nota de los 5 consejos que te vamos a contar a continuación, y no te saltes ni un detalle. Son cosas que quizás pasas por alto y que muy pronto pueden hacer que te enamores de tu nueva cocina, o lamentes haber metido tanto la pata. ¡Vamos con ellas!
En este artículo
- 1. La importancia del triángulo de trabajo
- 2. Ojo con las esquinas y los muebles en alto
- 3. Sé práctico
- 4. Decisiones que van más allá de lo estético
- 5. Sostenibilidad
1. La importancia del triángulo de trabajo
¿Has leído algo ya sobre el triángulo de trabajo, verdad? Pues respétalo porque lo que pretende es facilitar que no tengas que recorrer media cocina para lavar los alimentos, o ir a buscar la sal. Prácticamente todos los profesionales en el diseño de cocinas lo tienen en cuenta, pero no está de más recordar. Seguimos con la vitrocerámica, y el fregadero: nunca los pongas pegados a una pared. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que es más práctico trabajar en ambos, con sitio en los lados. Tema lavavajillas ¿dónde lo pongo para respetar ese triángulo? Siempre cerca del fregadero (o debajo, si tiene escurreplatos) para que puedas aclarar la vajilla sin pasear demasiado los platos mojados. Y hablando de residuos, ninguna cocina de hoy se puede plantear no contar con un espacio destinado al reciclaje. Los orgánicos es mejor tenerlos cerca de la zona de trabajo: un cubo extraíble cerca, o empotrable dejado de la encimera, bastará. Tenlo presente y pide que en el diseño en 3D que te preparen, esté previsto un módulo o sistema de cajones en el que clasificar papel, vidrio, plástico y residuos orgánicos. Póntelo fácil y verás cómo reciclar te da menos pereza, ¡y colaboran todos!
2. Ojo con las esquinas y los muebles en alto
Las cocinas en L o con forma de U suelen tener módulos en ángulo que a veces nos cuesta aprovechar. Hay sistemas de todo tipo para que el acceso a los mismos no sea un problema, pero no dejes de fijarte también en los módulos de ambos lados de esa esquina. Si pones por ejemplo el lavavajillas o un horno, tendrás que cerrar una puerta para abrir el otro (o a la inversa) y ya tenemos otro problema con el que no contábamos. Lo ideal es que los muebles altos se agrupen en una sola pared, y así liberar lo máximo posible, la zona de la encimera. Si te agobia ver que llegan hasta el techo, hay un truco: pide que te pongan dos módulos (uno sobre el otro) en lugar de uno solo: el de abajo se cubre con una puerta a juego con el resto de la cocina, y el de arriba con una blanca que simula ser pared. Queda sensacional, aprovechas el espacio igual, ¡y no cansa a la vista! Recuerda que los módulos con bandejas extraíbles y los cajones grandes son más prácticos que las puertas, y que así puedes evitar poner tantos muebles altos.
3. Sé práctico
La batidora, el tostador, el exprimidor... casi siempre acaban sobre la encimera restando mucho espacio ¿Cómo se puede evitar? Muy fácil, diseñando un único módulo para guardarlos todos juntos, provisto de tantos enchufes como te hagan falta (sin perder de vista las nuevas franjas horarias). ¿Y dónde ponemos el microondas y el horno? ¿En una columna? Si es a costa de sacrificar espacio de almacenaje, ¡no! Puedes instalar el horno debajo de la placa vitrocerámica y no por eso dejar de tener una cocina moderna (que no te atormente este tema). Todo el mundo pide ahora poner el fregadero debajo de la ventana, y no es mala opción, pero si fuera oscilo-batiente, vas a tener un problema con el grifo (chocará a no ser que compres uno abatible) y con el escurreplatos, que también molestará. Son problemas que de primeras no se ven venir, pero que trabajando sobre un plano en 3D no se te van a escapar.
4. Decisiones que van más allá de lo estético
¿Deberías panelar los electrodomésticos? Va un poco a gustos, pero por lo general se recomienda (por estética) siempre que la cocina se integre en el comedor. Contar con un frigorífico de gran capacidad es algo que cada vez se considera más necesario (se ha puesto muy de moda), pero no a costa de meter con calzador una nevera americana en una cocina pequeña. Hay soluciones para lograr ese espacio refrigerado extra, sin tener que cargar con ese "neverón". Por ejemplo, los congeladores de cajón bajo encimera encastrables, quedan perfectamente integrados en la cocina (son un cajón más) y, según el modelo, tienen bastante capacidad. Y luego el tema de las campanas extractoras: ahora las hay inclinadas, o incluso grupos filtrantes ocultos en el techo, o la encimera. ¿Cuál compensa más? Depende. En cocinas abiertas al salón, las últimas son más caras, pero desde luego son las más discretas. A la hora de elegir no te quedes solo en su cara bonita, hay que leer bien las etiquetas para averiguar la capacidad de extracción, nivel de ruido y, más que nunca, el temido consumo.
5. Sostenibilidad
Encontrar un mobiliario de cocina 100% sostenible no es fácil. Pero sí fijarse en las etiquetas para elegir solo los materiales certificados por la FSC (Consejo de Administración Forestal) o de bajo impacto ecológico, como es el caso de las cocinas de microcemento. Electrodomésticos eficientes (etiqueta A++ o A+++) que encima consumen mucho menos. Y para la luz, siempre LED (en plafones, regletas, tiras, perfiles...). Grifos con aireadores que abren en agua fría, placas de inducción que calientan antes y ahorran energía. Las encimeras con espíritu verde son de Neolith, cuarzo natural o madera reciclada (entre otras). Decisiones que no tienen que ver sólo con la distribución, pero que suman para que consigas tu objetivo: una cocina cómoda, práctica, bonita, moderna, higiénica, y en paz con el medio ambiente.
¿Y para ti qué aspectos son básicos y no pueden faltar en la distribución de la cocina? Esperamos haber aclarado muchas dudas, y que consigáis el diseño perfecto para vuestra futura cocina.