¿Una cama en el armario o el pasillo? Soluciones para casas pequeñas

Una cama dentro del armario

Un armario puede ser un buen lugar para colocar una cama, sobre todo en espacios como el salón. Cuando está recogida nadie, absolutamente nadie, diría que tras esas puertas se esconde una cómoda y confortable cama. Además, dependiendo de las dimensiones de nuestro salón, podemos optar por camas más grandes, ideales para acoger a dos personas. Eso sí, mide bien el espacio total, pues al abrirla, puede ser que el resto de muebles estorben un poco. No obstante, si es para dormir, tampoco hay demasiado problema, se apartan y al día siguiente, al recoger la cama, vuelven a su sitio original. Fácil, ¿verdad?

Una cómoda con cama desplegable

Quizá no tengamos espacio para colocar una gran armario y ubicar allí una gran cama en su interior. No hay problema alguno. En el mercado vamos a encontrar un sinfín de soluciones. Es posible hacerse con pequeñas cómodas o armarios, de poca profundidad, cuyo interior guarda bien doblada una cama. Son ideales para colocarlos en rincones. Una forma de aprovechar espacio con un mueble decorativo que además cuenta con una cama extra para nuestro hogar.

Un pasillo con espacio para una cama

No es lo normal, no vamos a negarlo, pero lo cierto es que en muchas ocasiones nos encontramos con pasillos grandes, grandísimos, ya no en largo, sino en ancho. La mayoría de las veces estos pasillos anchos son aprovechados para colocar armarios empotrados, creando así más espacio de almacenaje. Pero además, también podemos aprovechar estos metros extra para colocar una cama. Una zona de descanso en mitad de tu pasillo que, además, puede quedar realmente bonita. Si no quieres renunciar al almacenaje, puedes colocar cajones o puertas en la parte inferior de la cama.

Cama extra en una habitación sin ventanas

Hay distribuciones antiguas que ubican habitaciones ciegas junto al comedor. Lo cierto es que antiguamente servía para dividir la zona de comer del resto del salón. No obstante, en la actualidad, estas habitaciones, muchas veces sin

ventana, pueden ser el lugar ideal para esconder una habitación de invitados. Una puerta corredera o una celosía harán que nuestros invitados tengan privacidad. Además, si no contamos con esta habitación, pero tenemos un comedor muy grande, siempre podemos construirla nosotros mismos. El resultado nos sacará de un apuro.

Un armario convertido en una habitación infantil

Me ha encantado esta idea en concreto. Podemos observar el proceso de transformación de un armario empotrado en una habitación infantil. Hay que decir que para hacer esto, el armario tiene que contar con la profundidad necesaria para meter una cama. Como vemos, la parte superior se aprovechó para colocar un colchón, mientras que la parte inferior fue destinada a estudio, aunque también puede dedicarse a u vieja función: almacenaje de ropa y objetos. Sin duda, un espacio realmente interesante, bien aprovechado y con muchísimo encanto.

Soluciones que se integran en el entorno

Esta es otra mezcla de habitación/armario en el comedor que se ha usado para alojar una cama. No obstante, lo que me gusta de este ejemplo es como se integra en el resto de la estancia. Se ha aprovechado el hueco del armario para poner una gran cama. Para separarla de la zona del salón y dejar pasar toda la luz se ha optado por una práctica estantería abierta que, además, se puede mover.

Ahora que ya sabes distintas soluciones. solo te queda aprender cómo se ponen las sábanas en la cama.