Antes y después de la reforma de 6 salones

Antes: este salón, de estilo muy clásico, hacía las funciones básicas de sus dueños, pero estos estaban cansados del mobiliario antiguo que ocupaba gran espacio. También les hastiaba que el salón fuera tan oscuro y que  la chimenea ocupase tanto con lo poco que la usaban.

Antes: esta cocina pedía una reforma a gritos: sus dueños se chocaban con los muebles, no tenían espacio suficiente para cocinar y, por su distribución, tampoco podían desayunar en la cocina. 

Después: la reforma estaba clara: en primer lugar había que planificar de cero la cocina, incluyendo una gran barra que tuviera una doble función: servir de mesa de apoyo para cocinar y también servir de barra para que la familia pudiera desayunar o comer en ella. La mesa del comedor se integró también como parte de la cocina y salón, eliminando cualquier tabique y puerta que separaba los dos ambientes. En el salón se construyó una estantería a medida y se decoró los tres espacios en tonalidades blancas y rosas. 

Después: lo primero que hicieron fue aprovechar los grandes ventanales que había en el salón para que estos iluminaran el salón y la cocina. En segundo lugar, dejaron las vigas del techo de color madera para dar sensación de hogar y aprovecharon la altura del espacio para ganar amplitud. Optaron por el color blanco en las paredes y renovaron parte de la cocina. El resultado: un solo espacio que hizo muy feliz a sus propietarios.

Antes: cualquiera podría pensar que el pequeño salón de este ático no tenía muchas posibilidades, pero si vemos el antes y después de su transformación, cualquiera cambiaría de opinión. 

Después: en este caso, la transformación que sufrió se basó en la eliminación de parte del banco para colocar una mesa y un televisor. El banco se restauró y se cambió la parte textil de todo el salón. También se pintó el salón de blanco y los rodapié, que antes tenían otro color. Se hicieron nuevas estanterías y se optó por una composición muy sencilla al ser un espacio muy reducido. 

Antes: es impresionante lo que un cambio de mobiliario, pintura y accesorios puede hacer en un salón. Lo que antes era un salón aburrido, oscuro, antiguo... se convirtió en un salón moderno, actual y muy luminoso gracias a un cambio radical de algunos de sus elementos. 

Después: elegir una gama cromática y mantenerla en todos los elementos del salón es muy importante para darle al salón un aspecto cuidado y agradable. Pintar el salón de blanco y rosa también hizo darle un aspecto renovado al salón al igual que apostar por elementos decorativos y accesorios muy conjuntados. Este salón no sufrió una reforma ni una nueva distribución, pero la renovación del mobiliario hizo que pareciera un salón totalmente diferente.